Los Movimientos de la Tierra

La tierra se mueve en el espacio. Vivimos a bordo de una especie de peonza gigante llamada planeta Tierra. Y como todas las peonzas, la Tierra no para de dar vueltas sobre sí misma, cada 24 horas aproximadamente damos una vuelta completa. No somos conscientes de este movimiento de rotación, pero si podemos observar algunos de sus efectos: 

• Sucesión de los días y las noches

Mientras un lado de la tierra está iluminado por el Sol durante el día, en la otra cara del planeta es de noche. La Tierra gira hacia el este, el Sol sale antes en los lugares situados hacia ese punto cardinal (levante) que en aquellos que están situados al oeste (poniente).  

• Los husos horarios 

Para que la salida y la puesta de Sol fueran coherentes con la hora que marca el reloj, decidió establecerse el sistema de husos horarios, que delimitan espacios cuyos habitantes comparten una misma hora. Así se dividió el planeta en 24 bandas verticales, partiendo del meridiano de Greeenwich. De esta manera, hay 24 husos horarios diferentes en el mundo, separados entre sí por 15º de longitud. 

• Las mareas 

La fuerza de la gravedad de la Luna y el Sol atrae a las grandes masas de agua de la Tierra. El movimiento del planeta hace que el nivel de los mares y los océanos suba o o baje según la atracción que reciben por parte de estos astros, dando lugar a las mareas.

(imagen tomada de icarito.cl) 

El otro movimiento que realiza la tierra es alrededor del Sol, es el movimiento de Traslación siguiendo una órbita elíptica. La duración de una vuelta completa es de aproximadamente 365 días y 6 horas. Según nuestro calendario, un año oficial tiene 365 días. Las 6 horas restantes se acumulan, para añadir un día más cada cuatro años, es el año bisiesto (366 días)

Efectos de este movimiento es la sucesión de las estaciones, debido a la inclinación del eje de la tierra, hace que la superficie del planeta más expuesta a la radiación solar cambie a lo largo del año, lo que da lugar a las estaciones, pero no afectan a todas las zonas por igual: zona próxima al ecuador, siempre recibe la energía del Sol, por lo que la temperatura se mantiene siempre estable a lo largo del año. En los polos, solo reciben energía del Sol durante una época del año, lo que provoca que los cambios de temperatura entre el invierno y el verano sean muy grandes.  

Solsticio: es el momento de entrada del verano o invierno, y viene determinado por el día en el que los rayos solares inciden de forma perpendicular sobre uno de los trópicos, en cuyo hemisferio comenzará el verano. Durante el solsticio de verano se da la máxima duración del día y en el de invierno, la máxima duración de la noche. 

Equinoccio: momento en el que los rayos solares llegan de manera perpendicular al ecuador. Primavera y otoño, los rayos solares inciden de igual modo en ambos hemisferios. Dura lo mismo el día y la noche